Durante la tarde de este martes, dos personas fallecieron en situaciones distintas pero casi simultáneas en el departamento de San Martín. Una de las víctimas es una mujer policía de 32 años que prestaba servicios en el Gran Mendoza; la otra, un hombre que fue hallado sin vida en el interior de su vehículo en la zona de Alto Salvador.
El primero de los hechos ocurrió en un complejo de departamentos ubicado sobre calle Mitre, casi Viamonte. Allí, una mujer policía identificada como E.F., de 32 años, se habría disparado con su arma reglamentaria.

Vecinos del lugar informaron que escucharon una detonación y dieron aviso de inmediato al 911. Cuando personal policial arribó al sitio, encontraron a la víctima ya sin vida. Según fuentes judiciales, la mujer se encontraba sola en su domicilio y tenía una hija menor que, al momento del hecho, estaba en la escuela.
Minutos después, otro suceso conmocionó a la zona de Alto Salvador, donde un hombre identificado como G.V. fue encontrado muerto dentro de una camioneta. De acuerdo con información a la que accedió este medio, el hombre había sido denunciado meses atrás por estafa piramidal.
Un joven que se había reunido con la víctima fue quien pidió ayuda, luego de encontrarlo en el vehículo con un disparo. Si bien la principal hipótesis apunta a un suicidio, las autoridades no descartan la posibilidad de un homicidio.
En ambos escenarios intervinieron el fiscal Óscar Sívori, la doctora Miriam Escudero, y equipos de Policía Científica y Policía Forense.
Con el fallecimiento de la mujer policía, ya son seis los efectivos que se quitaron la vida en lo que va del año en la provincia de Mendoza, y el tercero registrado en el departamento de San Martín. Además, es el tercer caso que involucra a una mujer policía. Los hechos anteriores ocurrieron en julio —cuando una auxiliar de 25 años se disparó con su arma— y en septiembre, cuando una agente de 24 años se quitó la vida dentro del baño de su vivienda.
La cifra es alarmante y pone en evidencia la fuerte presión que atraviesa la fuerza policial, donde factores como bajos salarios, carga horaria y estrés laboral aparecen como elementos que podrían influir en esta problemática creciente.







































