En una entrevista realizada por Carina Coria en Mañanas de Ciudad, Alfredo Sozzi, director de programas tecnológicos, habló sobre el emocionante lanzamiento de la segunda etapa de los cursos de impresión 3D y robótica en General San Martín. El curso, que comenzará el viernes 18 de octubre, marca un hito importante en la región, consolidando a San Martín como pionero en la enseñanza de estas tecnologías. Sozzi destacó varios puntos clave sobre esta segunda fase del programa:

Éxito del primer nivel: La primera etapa del curso contó con una excelente recepción, con proyectos innovadores que se presentaron como trabajos finales. Entre ellos, sobresalió el caso de Sergio Cardozo, un alumno no vidente que creó un escáner 3D con impresoras 3D y asistencia robótica. La inclusión de Cardozo fue destacada como un ejemplo de cómo la tecnología puede ser accesible para todos, rompiendo barreras de discapacidad y abriendo nuevas oportunidades.

Aplicaciones en la comunidad: Sozzi mencionó un proyecto en el cual los estudiantes repararon el reloj del Palacio Municipal, que llevaba 20 años sin funcionar, utilizando piezas fabricadas con impresoras 3D. Este tipo de aplicación práctica demostró la relevancia de la tecnología en la vida diaria, mostrando cómo puede transformar procesos municipales y otras áreas de la sociedad.

Materiales avanzados: Durante la entrevista, Sozzi resaltó el uso de materiales de alta resistencia en la impresión 3D, como aquellos que endurecen como metal, alejándose de la percepción de que todo lo impreso en 3D es plástico o de baja durabilidad. Este enfoque ha permitido fabricar piezas mecánicas robustas, utilizadas en proyectos complejos como drones y brazos robóticos.

Proyección a futuro: El curso ha sido tan exitoso que ya se proyectan nuevos convenios, como uno con OSEP para la fabricación de armazones de lentes mediante impresión 3D. También se mencionó el desarrollo de piezas para drones, un ejemplo de cómo la robótica y la impresión 3D están avanzando en la región, con aplicaciones que no solo impactan en la industria, sino también en áreas de salud y bienestar social.

Deserción cero: Uno de los aspectos más impresionantes de esta formación ha sido la continuidad de los estudiantes. Según Sozzi, ninguno de los que participaron en el primer nivel ha abandonado el programa, lo que muestra el alto nivel de interés y compromiso.

Sozzi concluyó invitando a la comunidad a sumarse a este innovador proyecto, subrayando que el curso no solo está destinado a formar profesionales, sino a generar un impacto positivo en la región a través de la tecnología.

Inscripciones abiertas para el segundo nivel de robótica e impresión 3D. ¡No te pierdas esta oportunidad de estar a la vanguardia tecnológica!

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