Con mayoría de juveniles y sin dejarse intimidar por rivales con experiencia en primera, la categoría reserva del Club Libertad se consagró campeona de la Liga Rivadaviense. En una entrevista cargada de emoción en el programa Última Parada, los jugadores y su cuerpo técnico repasaron el recorrido que los llevó a la gloria.
“Nos subestimaron, pensaban que porque teníamos chicos 2009 se iban a asustar… y no se asustaron nadie”, dijo uno de los protagonistas, que resaltó el valor de enfrentar equipos con jugadores bajados de primera. “Gracias a Dios, los pibes respondieron”, agregó.
El equipo viene trabajando fuertemente en inferiores, no sólo a nivel local, sino también en competencias regionales de alto nivel: “Jugamos con equipos de San Juan, San Luis y San Rafael, estamos en una liga muy fuerte”, comentaron.
Uno de los arqueros reveló cómo fue su camino: “Descubrí que quería ser arquero a los 15. Quise dejar varias veces, pero gracias a los profes y al entrenamiento, salí adelante”.
También hubo lugar para destacar el esfuerzo semanal: “Duele ir a entrenar con frío, con lluvia… duele mucho. Pero si lo que hacés en la semana lo podés mostrar en la cancha, todo vale la pena”, resumió uno de los referentes del equipo.
Con humildad, los jugadores contaron cómo vivieron la final: nervios, compromiso y un objetivo claro. “Los chicos nunca se achicaron”, aseguró uno de los laterales. Otro, desde el banco, resaltó: “Siempre con actitud, con los pies en la tierra, sabiendo de dónde venimos”.
El entrenador también aprovechó para agradecer a su familia y al plantel completo: “Me hicieron sufrir hasta el último, pero fueron los que empujaron todo el año. Campeones son todos: los chicos, los padres, los dirigentes”.
Además, destacaron que el trabajo no para: “Salimos campeones, pero seguimos entrenando. No hay que regalar nada”, afirmaron, pensando en el próximo torneo regional y la Copa Vendimia.