En una nueva emisión del programa «Hola Gente», conducido por Oscar Mila, Nadin Stenta, Mariano Godoy y Santi Stenta, el historiador rivadiense Enrique Pizzuto reveló los fascinantes orígenes de la Fiesta Nacional de la Vendimia, destacando el rol fundamental que tuvo un hijo de Rivadavia en la creación de esta celebración que hoy impacta a nivel nacional e internacional.
Pizzuto explicó que el primer antecedente de una celebración vendimial en Mendoza se remonta a 1913, durante el Congreso Nacional de Comercio e Industria. «Se organizan caravanas, hay unos cien cosechadores o gente de la viña que va a pie festejando, adelante iba una caravana con Heraldo», relató el historiador, describiendo cómo ese primer desfile recorrió las calles céntricas de Mendoza con carros ornamentados e incluso un tren decorado con uvas y cepas.
Sin embargo, el verdadero impulsor de la fiesta moderna fue el doctor Guillermo Cano, hijo de don Guillermo Cano, el primer delegado municipal cuando San Isidro era capital del nuevo departamento de Junín en 1869. «Aparece un rivadiense, hijo de don Guillermo Cano, el doctor Guillermo Cano, que es una familia muy antigua de Libertad», destacó Pizzuto. El joven Cano se recibió de abogado en Buenos Aires y, tras dar una vuelta por Europa donde observó fiestas de la vendimia, regresó con la idea de revitalizar esta tradición en su provincia natal.
Como gobernador de Mendoza en 1936, Cano junto al arquitecto Frank Romero Day consiguieron un decreto y establecieron la primera fiesta oficial el 18 de abril de ese año en el estadio del Club Gimnasia y Esgrima, con una asistencia de veinticinco mil personas. En un gesto de amor por su tierra, Cano hizo coincidir la inauguración de esta fiesta con la del puente que une Libertad con Rivadavia. «Como era un amante de su tierra, coincide que el mismo día se inaugura el puente de San de que va a Libertad», recordó el historiador.
La fiesta tuvo diversas sedes a lo largo de su historia. Después del estadio de Gimnasia y Esgrima, los desfiles se realizaban en el carrusel de la rotonda del Parque General San Martín. «Por algunos años se hizo con un escenario flotante en el lago», contó Pizzuto, describiendo una imagen que hoy resulta sorprendente. Posteriormente, la celebración se trasladó al antiguo autódromo, donde se aprovechó el desnivel de la serranía para crear un escenario grandioso, hasta que finalmente en 1953 se estableció definitivamente en el Anfiteatro Frank Romero Day.
El historiador también reveló una anécdota curiosa sobre Rivadavia en los primeros años de la vendimia. En 1938, hubo la primera virreina de Rivadavia, aunque según «la mala lengua», esta joven debió haber sido reina. «Dicen que le robaron la corona», comentó Pizzuto entre risas, explicando que existía un interés político ya que el gobernador Cano aún estaba en el gobierno y «necesitaba Rivadavia». No sería hasta 1952 cuando Francisca se convertiría en la primera reina provincial de Rivadavia.
Pizzuto rescató además el valor del primer carro alegórico de Rivadavia: «El primer carro de Rivadavia, fueron unos toneles, era muy chiquito». El historiador conservó durante años la fotografía sin conocer su autor, hasta que una señorita Lazzarini, que llegó desde Buenos Aires, le reveló: «ese carro lo hizo mi papá». Se trataba de un carpintero de la tradicional familia Lazzarini que tenía su taller en la calle España de Rivadavia.
Para cerrar, el columnista destacó la trascendencia actual de la celebración: «La vendimia no solamente representa la fiesta del vino sino que representa también el potencial económico de Mendoza y hoy ha alcanzado un nivel nacional e internacional».
El programa «Hola Gente» se emite todos los sábados y la próxima semana cerrará el año 2024 con un nuevo tema histórico: la historia de la bodega Gargantini, que según adelantó Pizzuto, fue «uno de los viñedos más grandes del mundo» con mil hectáreas en un solo paño.







































